jueves, 20 de marzo de 2014

Update!

Hola, hola! Ya vuelvo por estos lares para poneros un poco al día. La verdad es que la vida por aquí sigue igual. Estas últimas semanas ando muy ocupada con el trabajo y la verdad es que cuando tengo un ratito de relax o hago ejercicio o me tumbo en el sofá.

Pocas cosas interesantes han pasado últimamente como he dicho antes… hasta la semana pasada, la cual fue una muy ajetreada (hemos tenido hasta visita de la policía) xD

El lunes empezaba un poco mal (por no decir fatal) ya que me levanté con un dolor de espalda increíble y sin tiempo para descansar. Entre el frío que pasamos algunas veces y que algunos días (sobre todo los lunes) tengo que cargar con un montón de libros y un radiocasete sobre mi espalda mientras que recorro Sligo de punta a punta… Pues todo eso pasa factura. Al final el lunes no fue tan malo como me esperaba y se me pasó volado. Creo que el buen tiempo y el calorcito (13 grados) hicieron que el tiempo se me pasase más rápido.

Además, hubo un malentendido con mis niños de 10 años. Una de las niñas se pensaba que era hoy mi cumpleaños (no sé por qué, creo que una vez mencioné que mi cumpleaños era en marzo, pero no el día 10 sino el 26 xD) la situación fue la siguiente:

Sarah: Teacher, ¿hoy es tu cumpleaños?
Yo: ¿Mi cumpleaños?
Gus y Max: ¿Es tu cumpleaños? ¡Felicidades!
Yo: ¿Cómo?
Todos: Cumpleaños feliiiiz, cumpleaños felliiiiiz…
Jajajajajaja!! Después les comenté que mi cumpleaños era en 16 días y que lo celebraríamos el día 24 Lunes, que es cuando nos vemos.
Al final de la clase, Sarah se acercó a mí y me dijo: felicidades por adelantado. Y me dio esto (con dibujo incluido en la parte de atras):



:______________) LOVE.


El martes fue uno de esos días en los que piensas: “mira, mejor que no me hubiera levantado”. Me levanté de buen humor, preparé el desayuno con tranquilidad, miré el reloj, “ummm, el bus sale de aquí a las 10.30, tengo tiempo de sobra…”. A las 10: “bueno, todavía tengo 30 minutos, bien bien”. De repente, me da por mirar el horario en el papel que tenemos colgado en la cocina y me doy cuenta de que el bus sale a las 10.15. A correeeeeeeeeeer!!



Al final me dio tiempo y el bus llegó a las 10.25… menos mal que el tiempo nos acompañaba. Pero bueno, ahí no acaba todo. Llegué a Sligo a las 11 y tenía tiempo para pasarme por Penneys y comprarme un abrigo nuevo y más primaveral. En mi cabeza tenía la idea de comprarme uno azul marino porque me gustan los abrigos de colores oscuros (no me gusta destacar con un abrigo verde, blanco o rojo). Sin embargo, llegué y vi el mismo abrigo que me gustaba pero en rojo. Me lo probé y me gustaba pero… ¡¡¡ era rojo!!!  Parecía caperucita roja!!! xD Lo compré y cuando salí de la tienda pensé… Dios, que feo es. ¿Por qué me lo he comprado en ROJO?!!!! 

parezco caperucita roja!

Después de enseñárselo a mi antigua host mum, a mis padres, hermana y mi novio, todo el mundo me decía: “¡que mono es!” Y yo no paraba de repetir: “pfff es que es ¡ROJO!” “¿Y qué?”. Total, que me pasé tres días dando vueltas con la etiqueta puesta “¿Me lo quedo o no?” (Sí, es que con otra cosa no, pero con los abrigos tengo que pensármelo muy muy mucho y con ese tardé sólo cinco minutos en decidirme xD). Al final me lo he quedado pero no sé, no sé…

Total, que cuando salgo de la tienda, veo un whatsapp de mi hermana diciéndome que habían ido a ver a mi abuela y que si hablábamos por Skype. Si me hubiera comprado el abrigo en otro momento, hubiera podido verles por Skype, pero no estaba en casa y hasta después de dos horas no volvía… Eso ya fue el colmo para estar cabreada durante todo el día.


El jueves tenía clase con una de las aupairs en casa. Estábamos en mi habitación hablando cuando de repente oímos ruidos fuera (cosa muy poco común en un pueblo de 1.300 habitantes) pero no le dimos importancia. Diez minutos más tarde casi sufro un infarto: una mujer policía estaba en mi ventana con una linterna y saludándonos. Yo chillé y mi amiga, que no se había fijado en la mujer que estaba fuera, me miró con extrañez. De verdad, ¡qué susto!



En fin, salí fuera y la policía me preguntó que si vivía ahí (ehmmm… sí, ¿no lo ves?) y me preguntó que si habíamos oído ruidos. Le dije que sí y me dijo que había algunos chiquillos en la casa de al lado (una casa vieja en la que no vive nadie pero a veces los adolescentes se meten ahí a beber y a fumar hasta que los vecinos se quejan del ruido y la policía viene y les echan. Historias de Manorhamilton city).

El sábado por la mañana tuve clases y después salí a dar un paseo. A las 19,30 nos fuimos a Sligo a ver a Rackhouse Pilfer tocar en directo. Podeis verles aquí (muy recomendable).

https://www.youtube.com/watch?v=9EUUtg_QLNk


Este no era un concierto normal y corriente, ya que el primo de Anthony, mi novio, toca en esa banda, lo que significaba que toda su familia iba a estar allí: sus padres, sus cuatro hermanos más novios, sus tíos y sus cuatro primos más novios. Una locura.
Lo peor fue el viaje de ida. Yo iba con mis dolores de cuello y tras haber dormido sólo 5 horas la noche anterior. Las hermanas de Anthony nos recogieron en el coche de una de ellas: un nissan micra de 1995 que al ponerse a 100km/hora en carretera, parecía que iba a explotar jajajajaja.  Al llegar a Sligo, pasamos a recoger al novio de la dueña del coche. Total, que íbamos cinco en el Micra. ¡Parecíamos sardinillas en lata!
De camino al lugar donde íbamos a ver el concierto, nos encontramos a la policía que nos paró. Los que íbamos detrás no llevábamos el cinturón abrochado porque al estar ya en el pueblo, pensamos “bah, pa qué?” Total, que nos tocó achucharnos y empujarnos para abrocharnos los cinturones antes de que parasen el coche. Jajajajaja. El policía nos miró con cara de wtf? Y nos preguntó a dónde íbamos etc. Un show… jajajaja.

En concierto

Este lunes pasado fue san Patricio y hemos estado de celebraci'on durante todo el finde. Actualizar'e esta semana para contaros como celebramos esta fiesta en un pueblo perdido de la pequena Irlanda :)